Desde 1929 esta canción anda dando vueltas interpretada por muchos grandes de la música, adaptada a varios ritmos, voces, acentos y estilos, transmitiendo a millones de personas el desconsuelo que puede sufrir quien con tantas ganas quiere trabajar y se encuentra con la pobreza dándole un portazo en la nariz
Wikipedia dice que han sido más de 20 los intérpretes que han dado su voz a esta canción. Tal éxito, a lo largo del tiempo y de los miles de kilómetros, no se gana con una lírica pobre y predecible como la de tantas canciones que estorban por ahí. Todo lo contrario, esta canción logra hablar de lo cotidiano y lo trascendente, muestra el optimismo más sublime para luego pasar al desconsuelo más atroz, de un solo porrazo, sin mediar alguna consideración para el oyente.
Muy indicada metáfora para quienes, de la noche a la mañana, se nos desbarata un optimismo parecido, enorme, para pasar a preguntarnos algo como ¿Qué será de Borinquen, mi Dios querido? ¿qué será de mis hijos y de mi hogar?
Decidí quedarme con la versión de Daniel Santos, que es la que más me cuadra para estas ganas de tirarme al suelo a llorar
_____________________________________
LAMENTO BORINCANO (Rafael Hernández Marín)
Sale loco de contento
con su cargamento
para la ciudad, sí,
para la ciudad.
Lleva, en su pensamiento
todo un mundo
lleno de felicidad, sí,
de felicidad.
Piensa remediar la situación
del hogar que es toda su ilusión.
Sale loco de contento
con su cargamento
para la ciudad, sí,
para la ciudad.
Lleva, en su pensamiento
todo un mundo
lleno de felicidad, sí,
de felicidad.
Piensa remediar la situación
del hogar que es toda su ilusión.
Y alegre, el jibarito va
pensando así,
diciendo así,
pensando así,
diciendo así,
cantando así, por el camino:
"Si yo vendo la carga
mi dios querido
un traje a mi viejita
voy a comprar".
Y alegre también su mula va
al presentir que aquel cantar
es todo un himno de alegría.
En eso los sorprendela luz del día,
y llegan al mercado de la ciudad.
Pasa la mañana entera
sin que nadie quiera
su carga comprar, ay,
mi dios querido
un traje a mi viejita
voy a comprar".
Y alegre también su mula va
al presentir que aquel cantar
es todo un himno de alegría.
En eso los sorprendela luz del día,
y llegan al mercado de la ciudad.
Pasa la mañana entera
sin que nadie quiera
su carga comprar, ay,
su carga comprar.
Todo, todo esta desierto
el pueblo esta muerto
de necesidad, sí,
de necesidad.
Se oyen los lamentos por doquier
de la desdichada Borinquén, sí.
Y triste el jibarito va
cantando así,
llorando así,
diciendo así por el camino:
"Qué será de Borinquén
mi dios querido.
Que será de mis hijos
y de mi hogar".
Borinquén, la tierra del edén
la que al cantar el gran Gautier
llamo la perla de los mares,
ahora que tú te mueres
con tus pesares
déjame que te cante
yo también.
Todo, todo esta desierto
el pueblo esta muerto
de necesidad, sí,
de necesidad.
Se oyen los lamentos por doquier
de la desdichada Borinquén, sí.
Y triste el jibarito va
cantando así,
llorando así,
diciendo así por el camino:
"Qué será de Borinquén
mi dios querido.
Que será de mis hijos
y de mi hogar".
Borinquén, la tierra del edén
la que al cantar el gran Gautier
llamo la perla de los mares,
ahora que tú te mueres
con tus pesares
déjame que te cante
yo también.
Versión de Daniel Santos
Versión de Caetano Veloso
Para Resaltar:
Todo, Todo está desierto
El pueblo está muerto
de necesidad
No hay comentarios:
Publicar un comentario